Desde Valladolid saltamos hoy al 'Nuevo mundo', a las amadas tierras de América, y nos vamos a Buenos Aires. La sala de comunidad de las Religiosas de María Inmaculada, en la Avenida Córdoba, conserva la imagen de la Inmaculada que acompañó desde Barcelona a las primeras Hermanas que salieron de España. No podía M. María Teresa Orti enviarlas en mejor compañía.
La imagen ha procesionado algunas veces por las calles del barrio y lo hizo con ocasión de la apertura de las celebraciones centenarias. Los actos festivos de la clausura del centenario de aquella casa fueron también presididos por Ella como sello y garantía de la unión en la caridad que ha hecho posible la prolongada, presencia de las Religiosas de María Inmaculada en Buenos Aires al servicio de las jóvenes.
El piadoso ejercicio del 'Mes de mayo' nos sugiere hoy presentar a la Virgen, Madre Clementísima una flor de alelí y con ella actos de mansedumbre, en reparación por todos los que ahogan sus sentimientos religiosos y blasfeman contra Dios.
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