Un día como hoy... 7 de mayo

1919: Desembarcan en La Habana, la Madre Visitadora, María de Santa Teresa Romero Yagüe y su acompañante M. Gloria de María Gumá y Soler. Había salido de Bilbao el 16 de abril, a bordo del Vapor “María Cristina”. Con ellas embarcaron M. María del Gran Poder González, M. María de la Purificación Pascua, M. María de Santa Victoria Lobera, M. María Ascensión de Jesús García, M. María de la Santa Cena Abril y H. María de la Santa Cruz Martínez, destinadas a la casa de La Habana y México.

1922: El Sr. Obispo de Madrid, Dr. Prudencio Melo y Alcalde bendijo y colocó la primera piedra de la Iglesia en la Casa Madre.

La Casa Curia, aún sin concluir, cuando se instaló en ella el Gobierno General

1965: Primer viernes del mes de mayo. La Curia General se traslada desde Via Palestro, donde residía temporalmente desde el 8 de noviembre de 1959, a su nuevo domicilio, «Villa Santa María» en Via Cassia 585. Aquel mismo día, a las 6 de la tarde celebró el P. Ernesto Mura la Santa Misa en el oratorio provisional preparado en lo que sería Sala Capitular y dejó el Santísimo Reservado. Después de la Misa se erigió el Vía Crucis y se procedió a bendecir la parte de la casa que iban a habitar.

Mosaico dedicado a Santa Vicenta María

2015: Una reducida Curia (porque solamente están en Roma H. María Amelia Herrero, H. María Luisa García y H. Berenice Camacho), la comunidad de Via Cassia y la comunidad del Terceronado, viven una sencilla jornada fraternidad y de acción de gracias al Señor por los 50 años de servicio a la Iglesia en esta Casa Curia. Es cierto que desde 1958 hasta 1961 hubo una pequeña comunidad viviendo en la Villa adquirida para construir la nueva sede del gobierno general. Pero, como fecha significativa para la celebración jubilar hemos elegido, y tal vez no al caso, este día en el que M. María de la Redención Navas con todo su Consejo y algunas Hermanas más, se instalaron aquí y celebraron la primera Eucaristía.

50 Años de servicio a la Iglesia en Via Cassia

De Eucaristía a Eucaristía, como una eslabón más en la vida del Instituto, presidió la de hoy D. Carlos Mendiola Martínez, de la Secretaría de Estado del Vaticano, que nos invitó a tener presentes a las que hace 50 años celebraron la primera Eucaristía en esta casa y a las que dentro de otros 50 celebrarán la del primer centenario, sin olvidar a todas las que hoy formamos el Instituto. Con él concelebraron D. Giuseppe y D. Giovanni, dos sacerdotes que prestan servicio pastoral en el Hospital “Villa San Pietro” y se han hecho cargo de esta capellanía desde que en Marzo, nuestro capellán, D. Ángel Arrebola, regresó a su diócesis de Zaragoza.

M. María Eugenia Vicenti, que ha querido el Señor que esté entre nosostras estos días nos ha regalado con una sentida introducción para la Eucaristía:

Nada mejor que la Eucaristía, la acción de gracias por excelencia, para agradecer y hacer memoria de un 7 de mayo de 1965, día en que se celebró la primera Eucaristía en esta casa, al realizarse el traslado de la Curia General desde la casa de Vía Palestro, donde había tenido su residencia temporal.

Se hacía realidad un sueño que por otro lado respondía a un deseo de la Iglesia de que, Roma, cabeza de la cristiandad, fuera residencia de los gobiernos generales de las Congregaciones Religiosas.

El lugar de la celebración de la Eucaristía fue la sala capitular…Nada es casual para quien cree…Todo es expresión de la providencia de nuestro Dios.…  El Señor quiso bajar por primera vez al altar en el lugar físico en el que iban a fraguarse decisiones, en el que, bajo el impulso del Espíritu, la Congregación, representada en su máxima autoridad, iba a buscar y encontrar a lo largo del tiempo, caminos de respuestas al Carisma de Santa Vicenta María.

Queremos dar gracias al Señor por todo el bien realizado a lo largo de estos años en esta casa, que, en expresión de la Santa es "casa de Dios". "Nuestras casas son de Dios", ha dejado dicho en una carta (Carta 395, parr. 3, pag.  415, 1º Tomo). A la vez, pedimos por su intercesión eu Él siga siendo nuestra fuerza en todo y que por su gracia, esta casa, sea realmente siempre casa de Dios con todo lo que ello significa.  

Superioras Generales que han prestado su servicio desde Via Cassia

Despues de la Misa, como en cualquier fiesta que se precie, vino la mesa. Unas cuantas imágenes nos ayudaron a recordar algo de los comienzos de esta casa. La celebración solemne y compartida la viviremos el día 31 de mayo, cuando tengamos de regreso a la Madre General y puedan compartirla con nosotras todas las Hermanas de la Curia.